Al Olor del corderito

En plena ola de frío, con unos días despejados, con un sol radiante, y un pronóstico de unas temperaturas de -7 de mínima a 2 de máxima, nos disponemos a iniciar la ruta después de muchas gestiones para ver quién va a Arcones, cuántos somos para comer, cuántos salimos desde aquí.... Ilusionados, abrigados y pasmaos de frío, comenzamos a subir desde las nueve la mañana, los que afrontaríamos la subida al puerto, cuidado con esta "capita de hielo, por favor"....








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Llegamos a Santuil, la temperatura del radiador sube cuesta arriba..... pero que hace ese mangurrial en manga corta¡¡¡¡¡¡ madre, madre, como están las cabezas... Miguel se tapa la cara, como pensando " que no me conozcan, no quiero ser de los gilipollas que subieron aquí este día....¡¡¡¡¡ Arreando que nos pasmamos....























Al coronar el puerto nos abrigamos bien, guantes de plastico ( marca acme, de la gasolinera del empalme) guantes de nieve, bufandas y gorros de la chistera ( digo las alforjas) del Mago Ramón, .... y a topeee dirección Arcones.

por cierto el que nos iba a animar en el puerto con la bateria, no pudo esperarnos, se le congeló la batería, pero hizo lo que pudo el hombre...


Sin demasiados problemas afrontamos la bajada, por la umbría, hasta llegar al pueblo y encontrarnos con el resto de la gente.






Ruta llana desde Arcones a Pedraza, disfrutando del llano, los enebros.....






















Volvimos al restaurante de Arcones, donde pudimos disfrutar de una gran comida, un montón de amigos.
Con la panza llena, y la razón nublada por las ganas de terminar la aventura, afrontamos (algunos lunáticos) la subida al puerto y la bajada hasta nuestro pueblo, terminando sin graves percances este magnifico día.


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